En este artículo me gustaría comentaros algo que particularmente me apasiona y me parece una de las bases de la tecnología actual y de futuro. Pongo el foco en el Aprendizaje Automático (Machine Learning) y la Inteligencia Artificial (IA). Los pilares fundamentales de otras tendencias como BigData o DataScience.

Un tema que tanto me apasiona como no se lo iba a contar a los alumnos en el aula. El problema me lo encontré en como relacionar esta idea aparentemente tan complicada con la didáctica o metodología de una clase.

Para ello me puse a recopilar y adaptar diferente información y puntos de vista sobre el tema, hasta darme cuenta que muchos de estos puntos me llevaban a un único nombre, el matemático Alan Turing, considerado uno de los padres de la ciencia de la computación y precursor de la informática moderna. Alan Turing proporcionó una influyente formalización de los conceptos de algoritmo y computación, dos de los pilares fundamentales del aprendizaje Automático y de la Inteligencia Artificial.

Según un articulo que leí hace ya tiempo y del cual os dejo la referencia (http://www.eldiario.es/turing/Test-Turing-inteligencia-maquinas_0_225377744.html), Alan Turing fue un visionario y siempre creyó en que las máquinas podrían evolucionar logrando una inteligencia artificial. Para exponer su tesis de las máquinas pensantes ideó el juego de imitación, lo que hoy conocemos como el test de Turing

“Si una máquina se comporta en todos los aspectos como inteligente, entonces debe ser inteligente”

 Cuando leí aquellas palabras “juego de imitación” y “test de Turing” dije… esto me lo tengo que llevar de algún manera al aula. Si consigo realizar alguna forma de gamificación o didáctica con estos conceptos probablemente lo alumnos puedan entender de una manera sencilla como una máquina es capaz de aprender por si misma.

Para adentrarnos más en esta idea debemos saber que es exactamente “el Test de Turing” que según su inventor, nace como un método para determinar si una máquina puede pensar. Su desarrollo se basa en el juego de imitación.

“La idea original es tener tres personas, un interrogador, un hombre y una mujer. El interrogador está apartado de los otros dos, y sólo puede comunicarse con ellos escribiendo en un lenguaje que todos entiendan. El objetivo del interrogador es descubrir quien es la mujer y quien es el hombre, mientras que el de los otros dos es convencer al interrogador de que son la mujer.”

 Esta idea original me animo mucho más llevarlo al aula, me dí cuenta que no resultaría difícil no solo hacerlo en secundaria para entender el concepto, si no incluso poder intentarlo en alguno de los cursos de primaria. Ahora solo me quedaba adaptarlo y buscar el procedimiento metodológico a seguir para esta idea.

¿Test de Turing para estudiar un tema?

Basándome en la idea original de tres 3 personas, un interrogante, un hombre y una mujer, y en el objetivo de adivinar por parte del interrogante quien es la mujer, diseñé mi propio “test” para el aula.

Hagamos un ejemplo sencillo… «Gamifiquemos»

Imaginaros que estamos estudiando los seres vivos en la clase de ciencias. Explicar este tema en el aula dará una base de conocimiento a nuestros alumnos, pero lógicamente nunca podremos estudiar en detalle todos los seres vivos.

Vamos a sustituir el concepto de hombre y mujer por animales… cada uno de nuestros alumnos debe estudiar un animal en concreto, como tarea de aula o en casa. Una vez que recopilen y aprendan información sobre ese animal, escogeremos 3 alumnos para hacer nuestro test.

ES IMPORTANTE QUE ELLOS NO SEPAN QUE ANIMALES SON CADA UNO.

  • Alumno1: Jirafa
  • Alumno2: Elefante
  • Alumno3: Tiburón

Vamos a estudiar el Elefante.

Por lo tanto podemos pintar el escenario como:

  • Alumno1: Interrogador
  • Alumno2: Elefante
  • Alumno3: La Computadora que aprende

 Decidimos que el interrogador debe adivinar quien de los dos es el “Elefante” y quien la “computadora”

Lógicamente siguiendo la idea de Turing el Alumno2 deberá contestar de forma correcta a las preguntas para convencer al interrogante que él es el “elefante” mientras que el alumno3 deberá contestar las respuestas de la forma más convincente con su pequeña base de conocimiento sobre ese animal, del cual él no se ha estudiado.

La metodología del ejercicio está en que el interrogador deberá usar preguntas específicas sobre el elefante para aprovechar el conocimiento que tiene el alumno que se ha estudiado previamente ese animal y así poder reconocerle.

Sería una perdida de tiempo hacer preguntas tan sencillas como ¿Tiene trompa?, ¿Cuántas patas tiene?…. son preguntas que cualquiera de los dos alumnos podrían contestar “sin pestañear”.

Escenarios:

Para realizar este juego puedes plantearlo de diferentes maneras según el nivel del aula, el numero de alumnos ó el tiempo dedicado.

Yo lo he realizado de 2 maneras diferentes que aquí os expongo, pero como ya os digo este de Test de Turing es “muy adaptable” a nuestro aula.

1º FORMA

  • Realizamos el test a viva voz y que ambos interrogantes se escuchen sus propias respuestas, de esta manera se deberá alternar el orden de respuestas ó que el interrogador elija quien quiere que conteste primero.

 2º FORMA

  • Realizamos el test en silencio, el interrogador hace las pregunta y los alumnos 2 y 3 contestan de forma individual en un papel. En mi opinión creo que esta es la mejor opción, además para este escenario podemos usar recursos como TodaysMeet para crear un chat cerrado entre los 3 alumnos.

PAUTAS DE TIEMPO

  • Importante establecer tiempo del test, puede ser por tiempo real ó por número de preguntas.

Objetivo.

Partiendo de que el objetivo natural del test es adivinar quien es verdaderamente el “elefante” y quien es la “computadora”, obtenemos también que el alumno que se estudió el animal elegido, repase todo lo aprendido por medio de las preguntas del interrogador.

Que el interrogador aprenda los datos del animal por medio de sus propias preguntas, importante hacer entender al interrogador que hacer preguntas sin ningún tipo de lógica le puede llevar un camino sin salida.

Finalmente tenemos a nuestro alumno3, en el papel de “computadora”. Él parte de una base de conocimiento que ira mejorando y perfeccionando gracias a las repuestas del alumno2, por lo cual de esta manera cada vez será mejor en sus repuestas y conocimiento sobre el animal para poder confundir al interrogador.

Nuestra conclusión:

Un aprendizaje colaborativo entre alumnos del cual se puede aprender y repasar a diferentes niveles, haciendo las mismas preguntas, usando el mismo tiempo y el mismo procedimiento.

Sería genial que al finalizar el ejercicio explicáramos a los alumnos como el Alumno3, nuestra supuesta “computadora” ha sido capaz de aprender por si misma los detalles de un elefante, únicamente usando la imitación y lógica de las respuestas y preguntas de los otros dos alumnos.

Nuestro pequeño Machine Learning en el aula!!!!!! 

Para terminar os planteo la siguiente pregunta:

 ¿Llegará un momento que como decía Turing, no seremos capaces de distinguir si hablamos con un humano o con una máquina?